sábado, 29 de septiembre de 2018

Karin Svensdotter. La Bruja del Bosque

Las brujas, mujeres sabias de la Edad Media, fueron
injustamente condenadas por los poderes de la época, en
especial la Iglesia católica, tan deseosa de destruir todos los
cultos anteriores donde se venerase la Naturaleza. A causa de ello,
tal vez fueron las brujas las últimas sacerdotisas auténticas de la Diosa.

Marcvs Espinel


Una ilustración hecha en 1910 dónde se retratan al Rey y la Reina de las hadas. Artista desconocido

Bienvenido una semana más lector a este blog, como podrás darte cuenta e decidido darle un look nuevo y refinado a esta pagina. Espero de todo corazón que te haya gustado. Hoy vamos a hablar de un tema, para mi, bastante interesante: Las brujas. Prepárate pues te contare la historia de la señorita Karin Svensdotter. Yo cariñosamente la e llamado la "Bruja del Bosque", pero no por la razón que se te pueda estar ocurriendo, a medida que vayas leyendo sabrás porque. Vamos a comenzar, les parece.

Ves la imagen que e puesto, ¿cierto? Una pequeña ilustración del rey y reina de las hadas. ¿Porque la puse si voy a hablar de una bruja?. Pues veras esta Bruja no tiene una historia que tu puedas llamar "normal"; ella nunca mato ni hirió a nadie, pero el terror que la gente le tenia era tal y los rumores que transpiraban sobre ella eran tan sorprendentes, que a nadie le pesaba el hecho que estuviese en cosas no muy puritanas.

Karin Svensdotter, era una mujer Sueca, la cual era capaz de desaparecer por meses en los frondosos y tupidos bosques, no conforme con esta de por sí inusual práctica, sus ropajes y apariencia no sufrían el más mínimo cambio. Esto durante el siglo XVII, era de lo más extraño y peligroso no solo a ojos de la muchedumbre si no de la propia Iglesia. Pero yo te e hablado de unos rumores, cierto. Pues esto que te conté, no eran dichos rumores, todos sabían sobre sus escapes al bosque, era todo un hecho dentro de la sociedad. Pero debido a la duda sobre qué hacía durante dichos escapes, alguien no tardó en dilucidar que ella sostenía relaciones carnales con criaturas del bosque, y que era protegida por ellos. Pues no existía otra respuesta a ojos de nadie a tales incógnitas. 



En 1656, la tan enigmática bruja fue finalmente enjuiciada por un tribunal de la inquisición, sus testimonios no ayudaron para nada a probar su inocencia. Karin no dudo en ningún momento en reconocer los rumores que la gente despotricó sobre ella: le dijo a la corte que había conocido a un hombre hermoso que vestía ropas doradas en una montaña llamada Grönskulle, dónde cantaron y bailaron acompañados de otras criaturas. El hombre se llamaba a sí mismo Älvakungen (Rey de las hadas), y a la par de de recibir los regalos que el le dio, tuvo el placer de sostener relaciones con este ser (ahora sabes por que puse la imagen del principio). En el siglo XVII la existencia de seres tales como hadas era admitida por la iglesia, que consideraba un grave crimen el asociarse con dichos seres. Pese a que no había leyes específicas en contra de mantener relaciones carnales con espíritus de la naturaleza, las autoridades solían tratar estos casos como sodomía, o más específicamente zoofilia, debido a que los seres mitológicos son considerados seres no-humanos y suelen tener características o partes del cuerpo de animales.

Curiosamente, y esto a traído controversia hasta nuestros días, el tribunal la absolvió del cargo de Brujería. Esto ante los ojos de todos los presentes que habían sido testigos en primera persona de la confesión de Karin; dijeron que ella estaba loca y por eso estaba libre del crimen. Los propios habitantes no podían creer tales palabras, y así de rápido como acusaron a la señorita comenzaron con los propios jueces. Pues ellos estaban convencidos que se encontraban asustados no solo de la conocida bruja, sino de sus extraños amigos. 

En estos casos siempre se había dictado sentencia de muerte, pues se creía que los seres mágicos del bosque eran nada más que formas que el diablo adoptaba para atraer a la gente. En 1658, un ladrón fue sentenciado a muerte después de confesar ante la corte que sobrevivió en las tierras salvajes gracias a las relaciones sexuales que mantenía con skogsrået, una ninfa del bosque. Un poco más tarde, en 1691, un hombre llamado Sven Andersson fue sentenciado a muerte al confesar mantener relaciones sexuales con una bergrå, una ninfa de la montaña. Pero Karin sobrevivió con el único castigo de que los sacerdotes rezaran por su alma lo cual alejo a sus peculiares acompañantes. Sin duda una de mis brujas favoritas, espero hayas disfrutado su historia, nos vemos la próxima semana. 



3 comentarios:

  1. sentenciaron a los hombre a muerte
    y a la loca de karin no? una historia
    algo feminista...

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    1. Le temían a sus "amigos" del bosque.

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    2. Bueno esta abierto a tu interpretacion. Pero sin duda su historia es de mis favoritas en el mundo de las brujas, precisamente por lo extraña que fue.

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